El telescopio espacial Planck tiene como misión estudiar la radiación de fondo de microondas. Según publica la Agencia Espacial Europea, el helio líquido que refrigeraba sus instrumentos de observación se ha agotado, lo que significa que su misión principal se puede dar por finalizada.
El telescopio espacial Planck, lanzado en mayo del 2009, es un satélite de la Agencia Espacial Europea cuya misión de elaborar el mapa mas preciso jamás hecho de la radiación de fondo de microondas, la radiación residual dejada por el Big Bang, la explosión que dio origen a nuestro universo.

Mapa de la radiación de fondo elaborado por el Planck
Para conseguir este objetivo, los instrumentos de observación del Planck se enfriaban con helio líquido para mantenerlos a una temperatura solo unas décimas por encima del cero absoluto; de esta forma se elimina cualquier calor residual que quede en los instrumentos y que podría interferir la débil señal.
El Planck ha funcionado normalmente durante 30 meses, el doble del tiempo necesario para completar el mapa de la radiación de fondo, hasta que el pasado 14 de enero el helio terminó de evaporarse. Aun sin refrigerante, el satélite podrá seguir funcionando durante unos meses mas, recogiendo datos que servirán para afinar la precisión de la información ya recogida.
Aunque en el 2010 ya se hizo pública una parte de la información recogida por el satélite, la información completa se publicará en el año 2013; esta información, además de mejorar nuestro conocimiento sobre el origen del Universo, se cree servirá para determinar si existe el Multiverso, es decir, si nuestro universo es solo uno mas entre una infinidad de universos.
FUENTE: ESA.
