Investigadores de la Agencia Espacial Europea han estudiado el impacto de las una ráfaga de viento solar sobre la Tierra y Marte, y han confirmado algo que ya se intuía pero sobre lo que no existían pruebas: El campo magnético terrestre es vital para mantener la integridad de nuestra atmósfera.
El viento solar está formado por partículas con carga eléctrica, principalmente protones y electrones, que tienen potencia suficiente como para arrancar gases de las atmósferas de los planetas y expulsarlos al espacio. Desde siempre, los investigadores han supuesto que el campo magnético terrestre desvía la mayor parte del viento solar, minimizando la fuga de gases, aunque no podían demostrarlo. La única forma de medir la protección que da el campo magnético es comparar el efecto de una ráfaga concreta de viento solar en dos planetas distintos; uno con un campo magnético muy potente, como la Tierra, y otro con un campo magnético muy débil, como Marte.

Comparación entre los campos magnéticos de Venus (arriba), la Tierra (centro) y Marte (abajo)
Esta comparación se pudo hacer el 6 de enero del 2008. Ese día coincidió una alineación entre la Tierra y Marte con una ráfaga de viento solar particularmente potente; los investigadores usaron las naves Cluster y Mars Express para medir las pérdidas de aire en las atmósferas de ambos planetas.

Ráfaga de viento solar del 6 de enero del 2008. En la animación vemos como impacta contra la Tierra y contra Marte
El resultado de la medición es que la ráfaga arrancó diez veces mas aire de la atmósfera marciana que de la terrestre. A lo largo de millones de años el efecto de esta pérdida continua tiene que ser catastrófico; de hecho, los investigadores coinciden en que el viento solar debe ser el responsable de que Marte tenga una atmósfera tan tenue.
El siguiente paso es repetir este experimento para comparar la Tierra y Venus. Al igual que Marte, Venus tiene un campo magnético muy débil pero su atmósfera es mucho mas densa que la de la Tierra, con lo que los investigadores tienen mucho interés en repetir esta medición. Afortunadamente, en los próximos meses se producirá una triple alineación de la Tierra con Venus y Marte, lo que permitirá realizar un estudio en profundidad. Los investigadores planean una campaña de observación a gran escala que incluirá a las sondas Venus Express, Mars Express y STEREO.
FUENTE: ESA.
